Los sistemas de mantenimiento de la presión optimizados existen en distintos tamaños. Ayudan a ahorrar energía y a asegurar la calidad del aire comprimido y pueden integrarse en sistemas superiores de control y vigilancia.
Si una red de aire comprimido presenta muchas fugas, puede ser que el sistema de tuberías llegue a vaciarse tras un tiempo largo de desconexión. Tras el arranque, los compresores suministran aire comprimido a una red vacía. Al suceder esto, los componentes de tratamiento, como los secadores y los filtros, se ven sometidos a una presión diez veces superior a la habitual. Debido a esta sobrecarga en el arranque, la red de aire comprimido se llena de impurezas a pesar de contar con un buen sistema de secado y filtrado. Los sistemas de mantenimiento de la presión de Kaeser Kompressoren permiten evitar este efecto no deseado de manera sencilla y económica.
El sistema de mantenimiento de la presión se instala en la estación de compresores a poca distancia por detrás del último componente de tratamiento. De esta manera, la estación permanece presurizada aunque se desconecten todos los compresores. En el momento de retomar el trabajo, este sistema le permite alcanzar la presión necesaria en el sistema con rapidez y sin sobrecarga de arranque. Cuando se alcanza esta presión se abre la válvula del sistema de mantenimiento de presión, manteniéndose constante la presión de servicio del secador y el filtro. El regulador de presión inicial permite ahorrar energía, pero eso no es todo: además, contribuye a asegurar la calidad del aire comprimido. La nueva versión optimizada está equipada con un indicador del estado de la válvula que puede leerse a distancia y con funciones electrónicas de alarma. El sencillo sistema electrónico se puede programar fácilmente a través de un menú con guía de usuario. También es posible la conexión a sistemas superiores de control y vigilancia: El sensor de presión integrado actúa en tal caso como generador de señales.
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